
¿Por qué acudir al consultorio?
Es una zona tabú, íntima y privada, que como tal (y como cualquier parte del cuerpo) merece la suficiente empatía para su escucha y posterior rehabilitación.
Es espacio que tiene como objetivo tanto la promoción (a través de la educación), la prevención de complicaciones como así también la evaluación y el establecimiento de un diagnóstico kinésico con la consiguiente indicación de pautas a seguir para su rehabilitación.

