La ciencia ha avanzado, y provee cada vez de mejores “fórmulas” de leches maternizadas, sin embargo, aunque se conozcan los componentes de la leche materna, éstas no han logrado los beneficios de la lactancia natural. Esto se debe a que en cada mamada, además de alimento se provee al bebé de miradas, caricias, olores, cariño y un sinfín de entregas que ninguna fórmula es capaz de igualar.
Durante el embarazo madre e hijo interactúan de una manera única, comunicándose, sintiéndose, sin conocer aún sus rostros. El desarrollo emocional del niño comienza desde el primer momento. A partir del nacimiento, el vínculo experimenta una nueva etapa, un reencuentro en el que se utilizan todos y cada uno de los sentidos: tacto, olfato, gusto, visión, oído. Qué mejor momento que el de amamantar para sentir esa conexión en la cual las palabras sobran…? La madre lo sostiene, lo protege, lo alimenta de nutrientes y afecto. El niño la mira profundamente (su visión está desarrollada justo para alcanzar los ojos de su madre), acaricia con sus manitos el pecho, su pecho, su mundo. Bebé y mamá son uno. Su madre es su mundo. Puede olerla y sentir su calor, sus latidos; esos que lo acompañaron durante nueve meses.
Cada niño y cada madre son diferentes, cada relación es diferente. Por lo tanto, también cada pequeño tendrá su propia manera de tomar la teta y cada madre de ofrecerla. La lactancia es un encuentro amoroso de a dos, y esto implica reconocimiento, paciencia, entendimiento, comunicación y principalmente amor.La madre tiene la capacidad especial de hacer lo que el bebé necesita, de identificarse con él (proceso que viene desarrollándose desde la gestación) para saber qué siente, qué quiere, porqué llora. Cuando la relación, en los primeros tiempos entra en sintonía, se brinda al niño una confianza fundamental.
Mientras la madre lo sostiene, física y emocionalmente, le brinda seguridad, integridad que tendrá repercusión a lo largo de toda la vida de ese niño.
Beneficios emocionales de la lactancia:
En el bebé:
- - Favorece el vínculo afectivo con su madre y por lo tanto en relaciones futuras.
- - Genera tranquilidad.
- - Favorece el desarrollo del psiquismo.
- - Desarrolla confianza y seguridad en sí mismo.
- - Favorece el equilibrio emocional y afectivo.
- - Estimula la independencia.
- - Genera una actitud alegre, segura y satisfecha.
En la Madre:
- - Mejora la confianza en sí misma.
- - Mejora la capacidad de interpretar las necesidades de su hijo.
- - Tiene menos posibilidad de tener depresión posparto.
- - Siente una gran satisfacción.
Lic. Valeria Delgado
Psicóloga – Doula
MP 6554